Transcribimos literalmente la entrada de un blog al que somos asiduos, Surf30, para llamar la atención acerca del peligro que corremos cada vez que nos pegamos un baño, y que muchas veces pasa inadvertido, en ciertas zonas como las desembocaduras de los ríos (como por ejemplo en Barbate o Conil). Como bien nos comentan nuestros amigos de surf30, de una mala calidad del agua se pueden derivar serias enfermedades, y mas teniendo en cuenta los datos de la investigación hecha por la Universidad de Oregón, en la que demuestran que los surfistas tragamos diez veces más agua que los nadadores o los buceadores. De éste problema hace ya mucho tiempo que se vienen ocupando los chicos de Surfers Against Sewage en Inglaterra, organización con una dilatada experiencia en ésto de cuidar del planeta y de la salud utilizando como plataforma la manía de deslizarnos por las olas que tenemos muchos de nosotros, y que nos sirve de espejo dónde mirarnos para los precursores de RESPECT. Una de las ideas que tenemos en mente en nuestra asociación es analizar el agua de nuestros spots habituales para ver realmente a qué peligro nos exponemos y que podemos hacer para minimizarlo.